Según informa el Consejo General del Notariado de las 408.402 herencias que se tramitaron el año pasado, 42.987 fueron rechazadas. Esto supone un porcentaje del 10,5%.

La serie histórica no deja lugar a dudas, desde que comenzó la crisis las renuncias a estos legados han ido en aumento. En los años 2012 y 2013 el porcentaje de renuncias se situó en torno al 20%, en 2016 subieron más de un 3% y ha sido en 2017 cuando la subida ha experimentado un aumento considerable, cercano al 11%.

La elevada tasa que deben pagar quienes reciben una herencia debido al impuesto de sucesiones puede ser una de las explicaciones al aumento de las renuncias a los bienes legados. Se trata de un tributo que se recauda en el tramo autonómico y sobre el que no hay un único criterio, ya que también hay normativa estatal al respecto. Su elevada cuantía lleva a muchos contribuyentes a renunciar a las herencias porque no pueden hacerse cargo de la factura fiscal.

Sin embargo esta explicación no es la única, los expertos también señalan que la dificultad para vender el legado y obtener liquidez es otro factor.

Tampoco hay que obviar que muchas de estas herencias son inmuebles que llevan una hipoteca asociada. Cuando el valor del pasivo supera el del activo es normal que no se quieran hacer cargo de estos bienes.

Por último, desde el Consejo General del Notariado apuntan que cada vez es más habitual renunciar a una herencia a favor de sus hijos, ya que los descendientes no tienen que tributar. Es el caso de la comunidad andaluza, donde herencias inferiores a un millón de euros no tributan.

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